viernes, 1 de febrero de 2013

PHNOM PENH Y KAMPONG CHAM (CAMBOYA)

Del 24 al 28 de Enero de 2013

Después de unas cuantas horas de viaje, llegamos a Phnom Penh, capital de Camboya. Es una ciudad caótica, como todas las capitales asiáticas y llenita de motos..Yo las "paso putas" cruzando esas calles, a Sergio se le da bastante mejor, un día de estos me lo atropellan... jejeje

En cuanto bajamos del autobus, nos despedimos de nuestros nuevos amigos y nos fuimos al hotel que habíamos reservado. Como sabíamos que llegábamos tarde a la ciudad, no nos apetecía ponernos a buscar habitación tan tarde y reservamos por internet un hotel que nos costó 12 euros, el Lucky Star Hotel y que estaba bastante bien. Esa noche nos fuimos a cenar, dimos una vueltecilla y a la cama. Con tanto trajín de viaje ya no podíamos con nuestro alma.

A la mañana siguiente con las pilas cargadas nos pateamos toda la ciudad. Empezamos visitando el Museo del Genocidio "Tuol Sleng" que se encuentra ubicado en la calle 113. Era una de las prisiones donde los Jemeres Rojos interrogaban y torturaban al pueblo camboyano. Por esta prision pasaron 14.000 personas y sólo sobrevivieron 12 de ellas.
Para los que no tengáis mucha idea de lo que pasó en Camboya entre los 70 y los 80, os cuento un poco que nunca viene mal un poco de culturilla general... jejeje
Los Jemeres Rojos o también conocidos como la guerrilla camboyana surgieron tras la guerra de Vietnam. Alcanzaron el poder en 1975 y defendian una Camboya comunista de economía agraria. La ideología de los Jemeres Rojos tiene sus orígenes en el Comunismo Maoísta. Fue un gobierno totalitario que hizo que se desalojasen las ciudades, querían que la población viviese y trabajase en el campo. Prohibieron cualquier influencia "imperialista", todo el mundo tenía que tener lo mismo, no se podían utilizar máquinas, ni leer, ni estudiar, volver al trueque y abolir la moneda. Sometían al pueblo a sesiones de reeducación y si no eran reeducados los asesinaban.
La dictadura duró cuatro años y asesinaron y torturaron a una cuarta parte de la población camboyana, casi dos millones de personas. Ha sido uno de los mayores genocidios de la historia...

Se ponen los pelos de punta cuando estás entre esas paredes y ves en imágenes cómo torturaban a su pueblo. Les abrían la piel y les metían escorpiones, les colgaban por los brazos hasta que morían de agotamiento y dolor, tiraban a los niños al aire mientrás otro les disparaba cómo si fuesen perdices...

Cualquier persona inteligente o que lo pareciese, era aniquilada, sólo por llevar gafas o hablar idiomas eras torturado hasta la muerte. Esta es una de las galerias de la prision donde les metían para torturarles.

Es sorprendente el absoluto silencio de la gente que visita el museo y observa las fotografías de las torturas y las fotos que se conservan de muchos de los que allí fallecieron.

Está bien que existan este tipo de museos, que aunque no son agradables de ver, nos recuerdan las barbaries que los seres humanos hemos cometido a lo largo de la historia.

A las afueras de la ciudad hay un campo de exterminio "Choueng Ek", que se puede visitar, pero con este museo fue suficiente, de modo que nos fuimos a ver la zona más turistica y alegre de la ciudad.

Pasamos por la Plaza de la Independencia, una especie de Arco del Triunfo de estilo camboyano.


Nos perdimos por las calles de la ciudad y nos metimos a visitar algunos templos budistas. En Camboya por lo menos ha cambiado algo la arquitectura de los templos, ya estábamos cansados de ver siempre el mismo estilo. Son parecidos a lo que supongo que nos encontraremos en unos días en los Templos de Angkor, pero estos son en miniatura... jejeje

Después de horas caminando bajo el sol abrasador camboyano, llegamos a la zona del Palacio Real. En esta zona hay unos cuantos edificios del estilo del Palacio Real de Bangkok. Aquí se encuentra la residencia de los Reyes de Camboya.

Es una zona muy amplia, bonita, ajardinada y la entrada cuesta unos 5 euros. Esta parte de la ciudad es la más bonita y turística de Phnom Penh.


Seguimos pateando la ciudad hasta que el sol nos derritió en el asfalto y nos fuimos rojos como gambas a descansar al hotel. El sol camboyano es abrasador...
Por la noche, quedamos para cenar en el "Riverside" con Alejandra y Juan y cenamos en una terracita frente al río. A ellos no les había gustado mucho la ciudad y querían irse a Kampong Cham. Aunque nosotros teníamos pensado quedarnos unos días más en Phnom Penh, decidimos irnos con ellos a la mañana siguiente, asi que madrugón otra vez para comprar el billete y coger el autobús hasta Kampong Cham, que no sabíamos ni donde estaba. Aquí estamos con ellos en la estación de autobuses.

Durante el viaje pudimos observar el bonito y peculiar paisaje camboyano, es la parte buena de recorrernos el sudeste asiático por carretera, la parte mala es que se nos está quedando el culo plano de tantas horas de bus...

El viaje a Kampong Cham duró cuatro horas y cuando llegamos nos pusimos a buscar alojamiento. La ciudad es pequeña, nada turística y no tiene mucha oferta hotelera. Nos quedamos en el "Hotel Mekong", que es de lo mejorcito que hay en la ciudad y nos costó 8 euros la noche.

Dejamos las maletas en el hotel y nos fuimos a comer al mercado local. Comimos pollo a la brasa y una especie de choricillos dulces, que la verdad es que no nos gustaron nada. La comida de Camboya no tiene nada de especial y es bastante más cara que en Tailandia.

Por la tarde alquilamos, por un dólar, unas destartaladas bicicletas y nos fuimos a visitar los alrrededores de la ciudad. Llegamos a un puente de bambú que une la ciudad con una pequeña y aislada isla del Mekong, que creo recordar que se llamaba "Koh Mith".

El puente lo tienen que construir todos los años porque en la época de lluvias se destruye. Es el único medio que conecta la ciudad con la isla. Para cruzar el puente tuvimos que pagar 1 dólar cada uno.

Desde el puente hay unas bonitas vistas del Mekong y de las muchas barquitas de pescadores.

El paseo por la isla fue increíble. Todo el pueblo salía a saludarnos, la gente más maja que nos hemos encontrado hasta ahora, ha sido en esta pequeña y perdida isla. Todos los niños corrían detrás nuestro para chocar las manos y decirnos lo único que sabían en inglés, "Hello", "What is your name?".

La isla no es muy grande, pero tardamos cuatro horas en recorrerla porque cada poco, teníamos que parar para charlar con los lugareños.


En la mitad de la isla, nos encontramos con un bonito y tranquilo Templo Budista.


Los monjes estaban trabajando y cuando nos vinieron llegar, pararon para salir a recibirnos y nos invitaron a entrar a su casa.
Los monjes estaban dando clases de inglés a los niños del pueblo y nos invitaron a que cada uno de nosotros diese una pequeña clase de inglés.


Los niños eran para comérselos, de nuevo nos vinieron a la cabeza nuestros niños de Tailandia y las clases que les dábamos...

Los monjes eran majísimos, son los monjes más majos que nos hemos encontrado hasta ahora por el Sudeste Asiático. Están deseando practicar el poco inglés que saben. Este jovencito monje era encantador y guapísimo.
 

Los monjes aprovecharon para sacar su rudimentaria cámara de fotos y hacerse unas fotillos con nosotros. Supongo que nosotros somos para ellos tan exóticos como ellos lo son para nosotros.

Después de un rato dando clases a los niños, fuimos a visitar el templo y mantuvimos agradables charlas con los monjes que estaban por allí.

Continuamos nuestro paseo en bicicleta por toda la isla y de tanto parar, al final se nos acabó haciendo de noche en medio de la nada y tuvimos que volvernos corriendo hasta la ciudad.

Cansados pero emocionados por el bonito día que habíamos pasado, nos fuimos los cuatro a cenar y tomar unas cervezas en una terracita a orillas del Mekong.

Al día siguiente y con la buena experiencia que habíamos tenido el día anterior con el paseo en bici, nos volvimos a alquilar las bicicletas y nos fuimos a visitar unos templos que están a las afueras de la ciudad.
El primer templo que visitamos fue "Wat Nokor", un precioso templo preangkoriano.


A la entrada del Templo estaba la policía turística que quería que pagásemos 1 dólar cada uno por entrar. Juan, que es más "gitano" que nosotros, que ya es difícil, le dijo que eramos del norte de África, que no teníamos dinero y que cómo mucho le dábamos dos dólares por todos, lo cual el policia aceptó rápidamente y se metió el dinero en el bolsillo sin darnos ningún tipo de ticket. A sacarse un sobre sueldo.. jejeje

La visita estuvo muy chula, el Templo merece una paradilla.

Una graciosa monja,  recorrió el templo con nosotros intentando ponernos una pulserita de la suerte para sacarse unas perrillas, pero la pobre no lo consiguió.

El templo es del siglo XII y posteriormente se anexó a él otro templo con columnas de colores, una bonita mezcla.
Mirad que relieves tan chulos..

Después continuamos el paseo en bici hasta la Colina de los Hombres, donde se encuentra otro bonito Templo. Menuda cuesta para llegar hasta allí con la bicicleta... bufff

En el templo vivían dos simpáticos ancianitos que posaban amablemente para nuestras fotos, pobres hombres... No pudimos resistirnos y les dimos algo de dinero. Que hombres más majos..

Después bajamos la colina y visitamos una bonita biblioteca, la cual está coronada por una escultura muy similar a las caras de Bayon que se encuentran en los Templos de Angkor.

Esta zona está llena de monos, a los que no nos acercamos mucho, ya que son bastante traicioneros.. jejeje

La siguiente parada, fue en el templo que se encuentra en la Colina de las Mujeres, justo enfrente de la Colina de los Hombres. Este templo no tiene nada impresionante, unicamente las vistas.

Por último visitamos el poblado AMICA, una pequeña aldea gestionada por una ONG francesa que imparte clases de francés a los lugareños, les han puesto un sistema de agua y les ayudan a autogestionarse.


Compartimos un rato con una simpática familia que nos enseñó como tejían y nos echamos unas risas con su niña.


Al final nos hicimos más de 20 km en bicicleta con un calor de cojones...

Estos dos días han sido estupendos y hemos conocido la verdadera Camboya alejada de la turística capital.
 
Lo mejor del viaje ha sido la amabilidad y sonrisa de los camboyanos que son una gente encantadora.


A la mañana siguiente desayunamos con nuestros amigos españoles y nos despedimos de ellos para irnos a Siem Reap. Ellos tienen más tiempo que nosotros para ver Camboya y van a seguir visitando la parte rural.
Amigos os veremos de nuevo en las playas de Tailandia para tomarnos unas cervecitas y echarnos unas risas.
Nosotros continuamos nuestro camino para ver los increibles Templos de Angkor, una de las paradas obligatorias de nuestro viaje. Ya os contaremos que tal.






6 comentarios:

  1. Queridos amigos... que dias tan maravillosos pasamos juntos y que fantasticamente lo has narrado todo!!!! mientras leia, recordaba y no podia parar de sonreir y rememorar lo fabuloso y especial que es Camboya y sobretodo, lo mejor, la compañia y lo muchisimo que nos reimos... !!! gracias!!!

    ResponderEliminar
  2. La verdad es que pasamos unos días estupendos, la tarde en bicicleta por esa isla y la experiencia con los monjes budistas la recordaremos siempre. Besos para los dos

    ResponderEliminar
  3. hola chicos , quisiera haceros unas preguntas , pero no se como ponerme en contacto con vosotros , este es mi email , canarylondon@hotmail.com
    por favor escribidme en cuanto podais , gracias .

    ResponderEliminar
  4. Hola chicos, voy este verano 8 días a Camboya y me gustaría ir a Kompong Cham. Tengo algunas dudas que estaría muy agradecida si pudierías ayudarme a resolver.
    Os dejo mi email para que me contactéis cuando podáis: estelaroman260@hotmail.com
    Muchas gracicas por vuestra ayuda y enhorabuena por el blog,he pasado muy buen rato leyeendolo!
    Estela

    ResponderEliminar
  5. Hola chicos, una pasada las fotos me podríais aclarar una duda de como ir de kompong Chhanang a Siem Reap, no se si solo hay bus o si se puede ir a en barco también. Gracias mi email es Koxtello@gmail.com

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola koxtello, creo que sólo había bus pero ha pasado mucho tiempo y ya no nos acordamos de todos los medios de transporte. Un cordial saludo y que disfrutéis!!!!

      Eliminar