domingo, 2 de diciembre de 2012

CHIANG RAI Y TRIÁNGULO DE ORO

Del 19 al 25 de noviembre de 2012

Cuando estábamos descansando en Chiang Mai, nos llamaron de la Joy´s House para decirnos que tenían unos huéspedes que eran españoles y que querían hacer una excursión por el Norte de Tailandía, visitando Mae Salong, Chiang Rai y el famoso Triángulo de Oro. Como los huéspedes sólo hablaban español, necesitaban que hiciésemos de guias/traductores y allí que nos hemos ido. Ya sabéis que en este país valemos para todo, jajaja. Lo malo es que no hemos estado en toda la semana en el orfanato y Gisela no ha podido venir a visitarnos.

Esta semana ha sido como unas vacaciones para nosotros. La pareja de huéspedes era de Almería y eran muy majetes, más mayores que nosotros, pero hemos hecho buenas migas y hemos podido comer cosas ricas.. La comida del orfanato nos está matando y hemos comido con tanta ansiedad estos días que nos ha entrado a los dos una cagalera de la muerte ... jajaja.

Nuestra primera parada fue en el Templo Blanco de Chiang Rai. Es el monumento más importante de Chiang Rai, empezó a construirse en 1997 por Chaloemchai Khositphiphat y todavía está en construcción. Se calcula que se acabará dentro de 60 años.


Es un templo diferente que combina modernidad y tradición. En sus frescos se pueden observar zapatillas converse, super héroes, las torres gemelas ardiendo...


Es un templo admirado por algunos y criticado por otros, pero la verdad es que su belleza es incuestionable.


Los baños del templo son una pasada, no creo que haya otros baños en Tailandia como estos. Lo que véis dorado detrás nuestro y que parece un templo son los baños.


En el restaurante al que fuimos a comer, tuvimos la suerte de encontrarnos a Chaloemchai Khositphiphata, el arquitecto, y era un tío muy majete que no dudó en hacerse unas fotillos con nosotros y firmarnos un souvenir que habíamos comprado en el templo.


Después nos fuimos a ver el Templo Negro, que más que un templo es un museo. Está muy chulo...


Es totalmente diferente a lo que hemos visto hasta ahora .


Antes de llegar a Mae Salong paramos en un templo budista para hacer unas fotos de las bonitas vistas de la jungla y el monje que vivía allí sólo, salió a recibirnos y aprovechamos para hacernos unas fotillos con él.



Por fin, después de muchas horas de coche llegamos a Mae Salong, un pequeño pueblecito perdido en las montañas del Norte de Tailandía que está a unos 1800 metros de altitud. En el pueblo viven descendientes de soldados chinos, que después de la revolución de Birmania se refugiaron en esta zona.

Nos fuimos hacia el hotel y cenamos en un restaurante chino del pueblo, que tenía más mierda que el palo un churrero... La pareja se sorprendió bastante de la suciedad pero nosotros ya estamos acostumbrados al "concepto de limpieza tailandés" jajaja.

Antes de irnos a la cama nos tomamos unas cervecitas con Isabel y Antonio en el hotel. Isabel y yo no pegamos ojo en toda la noche porque en el hotel tenían gallos y no dejaron de "canturretear" en toda la puta noche... ¡¡¡¡Que horror!!! Sergio y Antonio que son de sueño fácil no tuvieron problema para dormir... Si por algo no me gusta el mundo rural... jajaja

Por la mañana, antes de desayunar, les llevamos a ver el mercado local donde la gente del pueblo y de las aldeas cercanas venden los productos que cultivan y algunos souvenir para los turistas.


Compramos a una señora Akka muy agradable unas pulseritas. ¡¡¡Mirad como tiene la boca !!!! Los Akkas mastican una especie de raiz que suelta un líquido rojo y les tiñe la dentadura.  Esta tribu creo que es de origen chino y hay mucha población Akka en el norte de Tailandia y  en Myanmar, son de los más pobres y desfavorecidos de la zona y como podéis ver tienen una estatura abrumadora, jejeje Nosotros tenemos muchos niños Akka en el orfanato.


Cuando estábamos desayunando en el hotel vino un grupo de niños Akka a vender pulseritas y nos rendimos ante sus encantos y le compramos una pulsera a cada uno.


Desayunamos en el hotel y nos fuimos a ver un templo en lo alto de la montaña.


Las vistas eran increibles, en las fotos no se aprecia lo impresionante que es el paisaje.


Después fuimos a visitar una plantación de té. Esta zona y el triángulo de oro eran conocidas por sus plantaciones de opio, que ahora han sido sustituidas por plantaciones de te.


Continuamos nuestro recorrido para visitar un poblado Lahu y estuvimos con los niños del pueblo, la verdad que son para comérselos. Nos llevariamos a unos cuantos a España...


Dimos un paseo por el poblado y nos sumergimos en la precaria forma de vida de los pobres lugareños.


Continuamos el camino hacia el Templo de los monos. Que miedito nos dan los jodios monos... Que traicioneros y que mala ostia tienen, como se pegaban los unos con los otros.


Estuvimos allí un buen rato viendo como los monos se pegaban por la comida que les daban los monjes.



Cuando pudimos echar a los monos de nuestro coche, nos fuimos hacia Mai Sai un mercado que está pegado a la frontera de Birmania y en el que Isabel aprovechó para comprar un montón de cosas.  Es de los mercados más baratos que hemos visto hasta ahora.


La última parada fue en el triángulo de oro, donde llegamos justo a tiempo para ver el atardecer. Lo que véis a la izquierda es Myanmar, la antigua Birmania, lo de la derecha es Laos y nosotros estamos en Tailandia. El río es el Mekong, el octavo río más largo del mundo y que tiene 4880 kilometros.



Por la noche cenamos con Isabel y Antonio en un bonito restaurante a orillas del Mekong y aprovechamos para pedir pescadito y carne, cosas que en el orfanato ni olemos. Después nos fuimos hacia el hotel pero como en la casa pegada al hotel había una fiesta con el típico karaoke tailandés decidimos irnos a tomar unas cervezas, ya que visto lo visto no ibamos a poder dormir.


Caundo la fiesta acabó y parecía que íbamos a poder dormir, nos fuimos al hotel pero otra noche más que no pegamos ojo. Había un corral llenito de gallos y gallinas que estuvieron toda la noche de cánticos. Odio a los gallos a las gallinas y a todo lo que se le parezca!!!!!

Por la mañana, escojonaditos, nos cogimos una barquita y nos dimos un paseo por el Mekong para ver los Casinos de Birmania y de Laos. En Tailandia están prohibidos los casinos y la gente cruza la frontera para poder jugar. Después nos acercamos hasta Laos y paramos en la isla de Don Sao donde hay un mercado llenito de imitaciones de bolsos y de artesanía local.


Ayudamos a Isabel a regatear en el mercado, ellos nos están acostumbrados al regateo asiático y ya sabéis que nosotros somos como dos gitanas... jajaja


Después fuimos a visitar el templo más antiguo de la zona y después iniciamos nuestro viaje de vuelta al orfanato.


Hemos pasado unos días de vacaciones por el norte de Tailandia, hemos comido bien y nos hemos echado unas risas, que más se le puede pedir a la vida ... jajaja

El sábado estuvimos en el orfanato con nuestros niños preparando el campamento que va a venir a visitarnos la semana que viene y preparando el espectáculo que tenemos que hacer en el Festival de Loi Khraton.



Hemos estado toda la semana fuera y ya los echábamos de menos...


Por la noche nos fuimos a Chiang Mai a despedirnos de Gisel.la que todavía está por aquí. Aprovechamos para darnos un maravilloso masaje de dos horas y el domingo estuvimos todo el día perreando, tomando unas cervezas, charlando y por la noche paseamos por el Sunday Market, como siempre, que se ha convertido en nuestro clásico de los domingos.

2 comentarios:

  1. Cómo me estaís dando mucha envidia, contraataco con lo único con lo que podemos: LA COMIDA ESPAÑOLA!

    Os guardamos unos boletus y unos níscalos de la mejor temporada otoñal de los ultimos 10 años!!

    Cuidaos mucho!

    Edu (CTN)

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  2. Pero esto que es, hombre...? Basta ya...

    Está siendo una muerte lenta y dolorosa para mi mente y mis ojos cada vez que tengo que leer vuestros posts. La envidia recorre mi cuerpo (serrano) y hace que cada día os odie un poquito más...

    Es broma hombre! no digo que no sienta envidia, pero aún y así me hacéis muy feliz de veros tan bien y felices viviendo algo tan impresionante e inolvidable que, seguro, os está haciendo crecer como personas. Si antes ya eráis grandes para muchos de nosotros ahora ya lo acabáis de dejar claro.

    Probablemente estáis viviendo uno de mis sueños, y espero algún día poder hacerlo y disfrutar de algo mínimamente similar a lo vuestro. Me encanta veros tan bien.

    Sabéis que os quiero mucho y espero poder veros prontito en vuestra visita "de descanso" a tierras españolas.

    Os quiere vuestra primita de Barcelona:

    Marina

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